¿Recortará Banxico? ¿Cuándo? (continuación)
Genevieve Signoret & Patrick Signoret
Al igual que nosotros, Banorte-Ixe espera recorte de 50-75 pb en la próxima reunión (viernes 8 de marzo). GSP también espera recorte este viernes. Banamex piensa que será en una de las próximas tres reuniones (incluyendo la del 8 de marzo).
Banamex, Nota Oportuna 19 febrero 2013, “Un Recorte en la Tasa de Fondeo es Ahora Nuestro Escenario Central. Pero, ¿El Objetivo de 3% Está Realmente a la Vista?”:
Ahora asignamos una probabilidad de 70% a un recorte en la tasa de fondeo que tendría lugar en la primera mitad del año. Una vez que Banxico ha utilizado tres de sus principales canales de comunicación (comunicado de política, minuta e informe trimestral de inflación) para reiterar (y reforzar) lo que interpretamos como un sesgo bajista, hemos revisado nuestra evaluación de probabilidades para un recorte en la tasa de política, la cual inicialmente elevamos a 40% tras la publicación del comunicado de la reunión de política monetaria del 18 de enero. Concluimos que las probabilidades de un recorte se han elevando a 70% y por tanto ahora es nuestro escenario central.
En específico, anticipamos un recorte de 50 pb que tomaría lugar en cualquiera de las siguientes tres reuniones de política monetaria. Un aspecto en que la comunicación de Banxico ha sido efectiva es en transmitir el mensaje de un eventual movimiento “de una vez por todas”, consistente con la idea de un “ajuste de intercepto”… Puesto que un recorte significaría que Banxico estaría dispuesto a asumir la incertidumbre respecto a si la economía es capaz de operar en un equilibrio nominal menor, pensamos que la labor de minimización de riesgo inclinaría el balance a favor de un recorte de 50 pb. En cuanto a la fecha en que podría ejecutarse tal recorte, y dado el papel secundario de los factores relacionados con el ciclo económico, encontramos pros y contras a cada una de las tres reuniones siguientes… Por lo tanto, por razones prácticas, anticipamos un recorte de 50pb en la reunión del 8 de marzo; si tal recorte no se materializa, asignaríamos la misma probabilidad de recorte con igual magnitud al 26 de abril. Dicho todo esto, hacia el cierre de la primera mitad del año esperaríamos ver que el fondeo se ubique en 4.00% desde el actual 4.50%.
[…] Nuestro análisis sugiere que la inflación general podría desempeñarse mejor que en el 2012, aunque esto significaría progreso en vez del progreso necesario para la convergencia al objetivo de inflación. Revisamos nuestro estimado de cierre del 2013 a la baja a 3.64%, congruente con un promedio de 3.68%. Estos estimados se comparan favorablemente con el 3.57% de cierre del 2012 y su promedio de 4.11%. No obstante, si discutimos sobre el logro de la convergencia al objetivo de inflación, nuestros estimados implican progreso en vez de un cambio radical –de acuerdo a nuestro escenario, la inflación subyacente cerraría 2013 en 3.27% y promediaría 2.97% en el año. Estos resultados reflejan nuestra visión subyacente: la inflación se ha estabilizado en México, aunque en un nivel superior al 3%, donde la inflexibilidad a la baja permanece como un tema central. En este contexto, encontramos que los argumentos de Banxico en línea con un cambio significativo en el logro de la convergencia como interesante y legítimo, aunque abierto a debate. Banxico ha abierto una discusión relevante de política, la cual continuará independientemente de las decisiones de política monetaria en el corto plazo.
Information published over the past month suggests that there has been a shift in the balance of risks that monetary policy must address. It looks less likely that the slowing of the economy will become more pronounced, so we can expect a limited reversal of inflation’s downtrend. Under such conditions, an orthodox approach to monetary policy would counsel leaving the reference rate right where it currently stands.
The central bank, however, can argue that the narrowing of inflation will prove to be more enduring, and that while the economic slowdown may prove less intense, it will continue to act as a break on the economy in 2013. In addition, the monetary authority could signal that the market has priced in a rate cut without having an impact on capital flows (demand for government securities on the part of non resident investors remains strong all along the curve) and, hence, without generating pressures in the foreign exchange market.
Should the Banco de México Board of Governors justify such a vision, it could decide at its next regularly scheduled meeting (8 March) that the time has come to lower its reference rate. We at GEA anticipate just such a move.